Si se lo preguntamos a los buscadores de oro que en 1849 intentaban abrir una vía de comunicación hacía el oeste para evitar las montañas y cruzaron este despiadado desierto que bautizaron con el nombre de Valle de la Muerte, probablemente dijeran Infierno.
El Valle de la Muerte es uno de los lugares más desconcertantes y maravillosos que se pueden contemplar, posee una belleza “exótica”...